El día 8 de marzo, el mundo experimenta un fenómeno astral con el rey Sol, al debutar como incalculables veces, con un nuevo eclipse que, supuestamente, al decir de los astrólogos, influye en ese odioso acompañante llamado EGO. El ego es una bacteria sico-emocional que mueve a los individuos a tener un escenario ambulante para mostrarse con más de lo que es y en el fondo lo que busca es un reconocimiento para sobrevivir a su espíritu invadido por bacterias ególatras.
Bueno, es una manera irónica de definir lo que los especialistas mencionan como una valoración excesiva de uno mismo.
Sigmund Freud, el padre del sicoanálisis, refiere que es la parte parcialmente consciente de la personalidad humana que controla la motilidad y media entre los instintos del ello, los ideales del superego y la realidad del mundo exterior.
Lo cierto es que el eclipse, íntimamente relacionado con el ego, aparece justo en la fecha de la celebración del Día Internacional de la Mujer, ¿Coincidencia? ¿Causalidad?, o un mensaje del universo directo a toda la humanidad para bajar el “volúmen” de aquellos que se creen, arrogantes, presumidos y son auténticos engañadores.
Una postura como la definida por Freud y sus colegas, puede fácilmente cruzar la frontera y de esta forma incluir a los mediocres, envidiosos por querer lo que otro tiene y eso, sin lugar a dudas, puede provocar la acción de llamar la atención de los demás en el intento de gritar: Aquí estoy, yo soy y soy mejor.
Se cuenta de una persona que cargaba con el mal del Ego, digo que es mal porque la actitud del ególatra es rechazada por no ser auténtica y además vacía. Al tratar de llenar esos vacíos, esa persona en cuestión, disfrazaba sus carencias aparentando ser original, hábil y con gran capacidad, pero como no todo lo que brilla es oro, finalmente se hizo fácil descubrir que se trataba de una mala copia.
Hay personajes que han pasado por este mundo ocupando sitiales sin merecerlo, indudablemente que fueron audaces, en el transcurso de su vida terrenal llamaban la atención cumpliendo roles que no eran propios, en una constante demostración de ser algo más de lo esperado. Así observamos el que fue pelotero, periodista, médico, abogado, maestro, hasta llegar a líder de todas las anteriores ramas. Se inscribe también en las indefinidas posturas, los señalados como narcisistas, son temas muy profundos y de mucha tela de donde cortar.
De cierto es que los estudiosos de los fenómenos universales y científicos, aprovecharon la ocasión del eclipse solar para hacer sus recomendaciones a aquellos que viven con el ego inflado como cotufas y con karmas o problemas acuestas.
El astrólogo y periodista Pedro Gonzalez Silva, indica: “Todo ese karma que llevamos, se amalgama en nuestro subconsciente y va formando parte de ese “ego”, que creemos que es nuestro verdadero “yo”, pero que en realidad forma parte de comportamientos adquiridos a través de nuestras experiencias, y nos coloca como seres vulnerables a la crítica, y nos somete a experiencias donde el orgullo nos hace depender de la opinión de los demás para mantener inflada nuestra autoestima, pero no la verdadera y esencial autoestima, sino aquella que nos provee el ego, que necesita de aplausos para estar inflada”.
¿Qué hacer pasado el eclipse? Los expertos recomiendan tomar conciencia del problema, aunque el rey Sol en el eclipse, aseguran, disuelve levemente el ego para acoplar el mundo a una sincronización mas auténtica en el modo de convivir entre seres humanos con más para dar que para aparentar.
La curación es libre y personal para que el aterrizaje no sea forzoso o forzado.
@susanamorffe
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