Marjorie de Sousa ha estado expuesta al ojo mediático por su relación con el también actor Julián Gil, su rompimiento y su pleito legal por la custodia, reclamo de paternidad y pensión de alimentación del hijo de ambos, Matías. En exclusiva, y por primera vez, la actriz de origen venezolano, que estrena nueva casa, Telemundo, conversó con Don Francisco y expuso su punto de vista de este drama al mejor estilo de una telenovela. Al famoso presentador le dijo, entre otras cosas, que muchas veces se sintió abandonada por el actor y que nunca podría sentir odio por el padre de su amado hijo.
DF: Mucho gusto de volver a verte; más linda que nunca. Después de ya… hace algún tiempo que no nos veíamos.
MDS: Unos añitos, Don Francisco.
DF: Pero no muchos tampoco.
MDS: No tantos.
DF: Eres la nueva adquisición, sé que vas a hacer esta nueva serie que se llama “Al otro lado del muro”. Creo que la escribió Donald Trump, pero no estoy seguro. Pero ya están empezando a grabarla, ¿verdad?
MDS: Ya estamos del otro lado del muro; lo logramos.
DF: Oye, ¿y cómo ha sido esta llegada a “Telemundo” después de tantos años en otra casa? ¿Cómo ha sido esta recepción? ¿Cómo te sientes?
MDS: Usted sabe lo que se siente, Don Francisco. La verdad que todos los cambios uno los tiene que agradecer en la vida, por algo pasan y solo Dios sabe en el momento que te toca. La verdad es que siempre dije…“en algún momento tocaré esa casa, “Telemundo”, estaré ahí trabajando y mira, se dio. Estoy muy contenta, la serie está increíble. Hay muchísima acción, hay de todo. Mi personaje está muy bonito. Es un personaje de una mujer guerrera, como la mayoría o como todas las mujeres de hoy en día, que no solamente es madre, también es una esposa engañada, es una esposa que pasa por una serie de cambios y…
DF: Ah, bueno, bueno, entonces déjame preguntarte, porque este año hubo muchos cambios; fuiste mamá.
MDS: Sí.
DF: Y yo diría que estás en… como dicen… la gente que hace farándula: “En el candelero”.
MDS: ¡Ay, Dios!
DF: Porque claro, has aparecido, yo diría, en este último año más por tu conflicto matrimonial, por tu conflicto con tu pareja, con tu hijo, más que nunca.
MDS: Sí, muy triste por eso.
DF: ¿Ha sido duro para ti este año?
MDS: ¡Ay! Ha sido un año de muchos cambios, de muchos sueños cumplidos, de muchos otros sueños rotos. El regalo más maravilloso que pude tener este año fue convertirme en madre.
DF: Y déjame hacerte una pregunta… ¿por qué has querido darme esta entrevista a mí?
MDS: Don Francisco, yo creo que ¿quién no lo admira a usted? Imagínese, desde chiquita, viendo su programa… el arte que tiene para contar las historias de una manera verídica, de una manera bonita. No necesita eso usted. Usted solamente habla y yo creo que tiene mil angelitos alrededor. Y su público lo quiere. Por eso mire…
DF: Muchas gracias. Pero deja entrar directamente a tu conflicto con Julián Gil.
MDS: ¡Ay, Dios!
DF: Quiero decirte que te conozco a ti y también conozco a Julián. Y así como te tengo que dar la tribuna que tú necesitas y quieres en este momento, si es que “Univisión” le da permiso, se lo doy a Julián también, pero hoy día tú eres la reina de este programa y queremos saber lo que estás sintiendo.
MDS: ¡Guau! Lo primero que pensé cuando me entregaron a mi bebé es: “¿cómo lo cuido de todo? Pero, sobre todo, de exponerlo de más”. Y la verdad, es muy difícil. Ahorita salgo a la calle y reconozco más a Matías que a mí. Y pues, lo más triste de esto es que lo reconocen por este escándalo y es lo que yo menos quería para mi hijo. Yo quería…
DF: Lo que no entiendo es que ustedes se conocen desde el año 2011.
MDS: De antes, en el 2007 nos conocimos.
DF: Sí, pero en el 2011 como que viven juntos un tiempo.
MDS: Sí.
DF: Y la cosa termina mal.
MDS: Teníamos proyectos distintos. Él se iba a México, yo me quedaba acá.
Sí, había mucha indecisión de su parte. Tengo que decir que sí la pasé mal porque yo aposté a una relación y como que quedó todo incompleto, me quedé como: “¿qué es esto? ¿y ahora qué”? Y pues, ya decidí cortar y dije:”por lo sano, mejor cada quien por su camino”. Y él tiene sueños, yo también los tengo y pues que continúe.
DF: Pero vuelves en el 2014.
MDS: Ya sé.
DF: Pisas la misma piedra.
MDS: Sí.
DF: ¿Y eso por qué?
MDS: Pues no sé. Yo creo que hay ciclos que uno no completa, no cierra y yo creo que eso nos pasó a los dos. Coincidimos en algunos proyectos; yo, la verdad, no quería regresar… Y pues fue una manera muy mágica cómo poco a poco se fue metiendo en mi vida y enamorando a mi mamá, a mis amigos…
DF: Y a ti.
MDS: Y a mí. El problema que ahí voy. Yo decía, ¿no? “Pues, a lo mejor, yo estoy viendo hacia otro lado y a este hombre ya lo conozco…” pues, ¿no? ¿verdad? “…y a lo mejor es el hombre de mi vida y yo no quiero darme cuenta”; y soy muy terca a veces. Y pues, bueno.
DF: ¿Qué es lo que más te ha dolido de lo que te ha pasado?
MDS: Exponer a mi bebé a todo esto, la burla pública… como mujer es… ¡Ay! Es difícil tener que salir a la calle… y dar la cara y decir: “yo no he hecho nada”.
Don Francisco, me quedé callada porque viví un momento de mucha confusión. Como mamá, creo que todas las que han sido mamás saben perfectamente lo que se siente. Y llegas a un momento en que dices: “¡¿Qué hago, Dios mío?! Te viene todo encima. Pero antes de ser mamá, ya venía por un proceso donde estaba sola. Durante el embarazo, estuve mucho tiempo sola, entonces…
DF: ¿Te sentiste abandonada?
MDS: De cierta manera sí, porque no es lo mismo hablar todo el tiempo por “Face Time”, ¿verdad?
DF: Déjame ver qué quisiera saber el público de ti, porque Jessica está ahí.
Mujer 1: Marjorie, ¿sientes que Julián Gil te amó de verdad o solo te utilizó por publicidad?
MDS: ¡Ay, Dios mío! Pues no quiero pensar eso, ¿verdad? Uno siempre espera que la persona con la que estás te quiera de verdad y no puedes creer que una persona pueda llegar a ser un villano de telenovela, ¿verdad?
JC: Y ahora, Marjorie, yo te quiero preguntar algo. Hemos visto todos, creo que la mayoría de los que estamos aquí y los que están ahí en casita, las lágrimas de Julián. Conmovió a muchos, a otros no. ¿A ti te conmovió verlo así?
MDS: Yo creo que… hay lágrimas más fuertes que se quedan tras cuatro paredes y muchas personas no ven. Hay muchos miedos…hay mucha impotencia… hay muchas palabras sin decir cara a cara. Por eso me he quedado callada, porque creo que ha sido un momento para mí, una montaña rusa emocional. Entonces, es así como que… hoy está todo tranquilo y, de repente, ¡no, no está tranquilo, ahí viene otra bomba! Ahí viene otra vez lo mismo y no puedes dormir porque tu bebé sufre contigo, porque está muy chiquito, estás conectada totalmente a él. Y él te ve y a veces… se me queda mirando como “mamá, ¿qué te pasa? ¿por qué estás… por qué lloras?”.
DF: Pero eso es lo que te quería preguntar. Tú estás grabando aquí y no estás con tu bebé.
MDS: Mire, la producción se ha portado increíble conmigo. Por ejemplo, estoy aquí tres días o cuatro, vuelo, estoy con él. A veces no duermo, me regreso directo al llamado y así me la he pasado estos días hasta que pueda obtener el pasaporte de mi hijo y me lo pueda traer.
DF: Pero Julián tiene derecho a verlo solamente una hora, una vez a la semana.
MDS: Don Francisco, eso lo dictó el juez.
DF: ¿Te parece justo?
MDS: No fue una decisión mía.
Cuando nosotros nos separamos, este… pues nada, él tenía la opción de ir a la casa a ver al niño. Por compromisos, empezó a pasar el tiempo y solamente fue una vez.
Entonces, yo dije: “Mira, esto va a ser muchos años. Yo creo que es mejor que quede un acuerdo entre los dos de… cuáles son los tiempos de él y cuáles son los tiempos míos; obviamente, él tiene derecho a estar con Matías…”. Y eso fue lo que hice, busqué unos abogados, llegamos a un acuerdo y le dije: “Oye, te quiero ver en tal lugar para sentarnos a hablar sobre las visitas del niño, sobre el tema económico – que también ha sido ¡guau!-, sobre todos los detalles, porque creo que debemos, o sea, con la vida que tenemos, debemos estar los dos claros”.
Me dijo: “¿Ese acuerdo es con abogado”, le dije: “Sí”. Me dice: “Bueno, dame chance porque yo voy a buscar mis abogados”. El caso es que llegamos a la oficina de mi abogado, yo estaba en el despacho de al lado esperando, porque iban a hablar entre abogados, yo iba a entrar en algún momento, ella le estaba explicando… hicieron una reunión larga, comentaron los puntos, le dijo mi abogada: “Mira, aquí está el acuerdo, discute tú lo que quieres y mándanos a nosotros para que hagamos un equilibrio”. Él se fue, dijo: “Sí, perfecto, dame cuatro días”. Saliendo de la oficina, ese del acuerdo, él fue directamente a demandarme a mí.
DF: Pero tú después lo demandaste a él.
MDS: Es que la demanda corría sola. Entonces… Y era por lo mismo. Yo no entendí, yo dije… Yo no entendí…
DF: A ver, ¿por qué grita la gente? A ver qué quiere decir la gente.
JC: Bueno, acá están gritando un que sí, que no. Hay gente dividida realmente. Pero yo tengo aquí otra pregunta de una de nuestras invitadas. Adelante.
Mujer 2: Hola, buenas noches.
MDS: Hola.
Mujer 2: Marjorie, me gustaría saber por tu parte cuál ha sido la mentira más grande que ha dicho Julián Gil sobre ti.
MDS: Hay muchas.
DF: La más grande.
MDS: Hay muchas muy fuertes.
DF: Una fuerte.
MDS: El tema… un tema muy difícil, que fue para mí cuando dijo: “Una relación es de dos, no de tres”; y dejarlo abierto delante de todo el público no solamente fue una mentira, sino, además, fue una humillación pública. El tema de los 200 mil pesos que ha dado la vuelta al mundo, cosa que no es cierta. Para usted no es un secreto que yo trabajo desde que tengo 19 años y jamás le pediría a él que me mantenga. Y ese dinero es falso, o sea, jamás le pedí eso. Cuando nos reunimos con nuestros abogados, con el juez, nos dijo a los dos, a las dos partes que por favor redactáramos los gastos que teníamos cada uno con facturas y todo. Y eso fue lo que yo hice, yo entregué todo y eso fue a una lista.
DF: Pero esta es una cosa de contención porque tú tienes este bebé anticipadamente, a las 34 semanas, el niño tiene un problema, viene enredado en el cordón umbilical, casi muere. ¿Tú recibiste en ese momento el apoyo de Julián?
MDS: Cuando… pasaban… Muchas veces me quedé sola, muchas… muchas veces me quedé sola.
DF: Ellos preguntan sí o no.
MDS: Y justamente el día que ocurre esto fue un domingo y le pedí a él que no se fuera porque el bebé podía llegar en cualquier momento, porque ya sabíamos que venía con este problema de las pulsaciones y todo, y era porque estaba enrollado. Ese día me deja en el… un domingo, recuerdo que estaba en el cuarto y, de repente, me empecé a sentir mal y salí corriendo a la clínica con mi hermano. Él llegó al día siguiente, estuvo conmigo ese día, pero luego se volvió a ir. Entonces, era como estoy, pero no estoy, estoy, pero no estoy…
DF: Pero…
MDS: Repito, Don Francisco, nunca dije: “No estés, no hagas tu trabajo”, nunca lo dije. Simplemente sabíamos el riesgo que corríamos…
DF: Lo que pasa es que yo te hice una pregunta y la gente quiere saber sí o no.
MDS: Pocas veces.
DF: ¿Te sentiste sola?
MDS: Sí.
DF: Mira, yo quiero hacerte varias preguntas: si todavía lo quieres, si podría haber otro tipo de solución, qué piensas hace de aquí en adelante. Te lo voy a preguntar después de estos mensajes.
MDS: Va.
DF: Aquí estoy con la nueva adquisición de “Telemundo”: Marjorie de Sousa.
Te hice las preguntas más difíciles para entrar en el tema.
MDS: ¡Ay, Dios!
DF: Pero ¿tú qué sientes hoy día por Julián?
MDS: Yo a Julián siempre lo voy a respetar. Jamás podría sentir algo feo por el padre de mi hijo, porque es el hombre que me dio el regalo más grande a mi vida.Yo sé que toda esta tormenta va a pasar. Ojalá esto se termine sanamente, porque siento que más que… que además es muy triste, mi hijo en el medio, siento que es más como una guerra de tú a tú y que, además, ni siquiera tiene sentido.
DF: ¿Por qué todo esto fue tan mediático desde la pedida de mano hasta que nace el hijo, las redes sociales, el primer día del bebé? Todo eso es muy mediático.
MDS: Sí, totalmente. Yo creo que ese fue uno de los puntos. O sea, a Julián le gusta mucho todo el tema de subir sus cosas; no se lo critico para nada. Yo llegué a un momento a sentirme un poco como incómoda porque yo sentía que era…a veces, estoy hablando con ese maquillaje y todo el rímel regado porque acababa de llegar de hacer cualquier cosa y… y es como una comunicación con tu pareja y es así como muy íntimo y, de repente, subía la foto y te exponía.
Entonces, era así como: “Pero pregúntame”, ¿verdad?
Entonces, bueno, yo creo que detalles…
DF: ¿Tú serías… -es una pregunta- capaz de dejar todo esto de las luces, el aplauso,el escenario para darle preferencia a tu hijo?
MDS: He estado pensando justamente eso el otro día. Venía manejando y decía: “Híjole, qué injusticia porque está tan chiquito, pero no puedo”. Y, entonces, ahora entiendo mucho a las mujeres que les toca hacer esto y que no saben y que, además, no tienen con quién dejar a sus hijos. En este caso, cuento con la bendición de tener a mi mamá viva y que me ayuda en todo y, de verdad, gente muy bonita que se ha acercado a mí y han sido como ángeles. Y mi mamá de verdad se ha puesto, o sea, me quito el sombrero. La admiro, la amo, la respeto…
DF: Decían que tu mamá podía haber sido parte de conflicto.
MDS: Sí, ese fue una de las cosas que… completando lo que la chica me preguntó del tercero en discordia; eso me dolió mucho. Yo creo que los culpables de haber fallado somos él y yo, nadie más. No podemos culpar a los otros porque creo que son excusas para decir: “Ay, terminamos por…”. No, eso no existe. Yo creo que uno sabe cuándo quiere continuar y cuándo no quiere continuar. Yo creo que hay personas que no tienen como, a lo mejor, esa visión o, a lo mejor, les da miedo tanto compromiso o, a lo mejor, les da miedo el enfrentar el tema de una familia el día a día, los hijos. No es fácil par nadie.
DF: Una pregunta. ¿Cuál es tu sueño de aquí para adelante?
MDS: Que se resuelva todo esto, que se aclaren todas esas tormentas y esas dudas que quedaron en el aire, como el tema del ADN de mi hijo. Él sabe, él me conoce. Julián me conoce perfectamente y él sabe: “Le voy a dar donde más le duele; su ego, su dignidad como mujer”.
Entonces, ¿qué pasa? Yo pedí, aclarando, que no tenía ninguna duda que mi hijo fuera de Julián. Y pedí al juez que si era necesario hacer la prueba de ADN, yo se la hacía a mi hijo, porque no tengo ninguna duda, Don Francisco, o sea, no me pasaría por la cabeza. Y otra cosa que quiero aclarar… si esta persona abre un juicio nuevo, que no tiene que ver con el proceso que llevamos, es un juicio totalmente distinto, es un juicio nuevo de desconocimiento de paternidad.
Si esta persona abre este juicio, ¿por qué no empieza por ahí?
Si él dice que no es su hijo, ¿por qué no nos ahorramos todo este desgaste y todo esto y comenzamos por: “Mira, hagamos la prueba de ADN y si no es tu hijo, pues bien, ya, no es tu hijo”? Pero ¿por qué no empezar por ahí?
DF: ¿Qué más te gustaría aclarar? Yo quiero darte esa oportunidad que tú le aclares al público cosas que tú crees que el público está equivocado.
MDS: Este… yo creo que a veces son un poco duros y, sobre todo, el tema de las redes sociales. Creo que ha empujado mucho a creernos dueños y Dios de la vida de los demás.
Señores, si yo no hablé, ha sido por respeto a mi relación, a lo bonito que mantuve… con lo que me quería quedar en la cabeza y con el sueño que tenía de formar una familia con él. Soy un ser humano y yo acepto que cometo errores. Y sí, la verdad es que todo este proceso yo creo que no tenía que haber llegado adonde llegó y me duele mucho por el tema del día de mañana, qué va a decir mi hijo cuando le pregunte a su papá o a mí: “¿por qué mi papá dudó que yo era su hijo?” o en la escuela, el bullying o algo. Yo lo pienso, no sé, ojalá mi hijo no le haga caso a eso. Yo digo que sea super open-mind y diga: “No, mamá, nada que ver, no…”. Pero sí lo piensas y te da mucho temor si dices ¿por qué esto? ¿Por qué llegar así?
DF: Seguramente, Julián está viendo este programa. ¿Qué te gustaría decirle?
MDS: Me gustaría decírselo en persona, Don Francisco. Y también me gustaría decirle que él viene de una mujer… y tiene una hija y yo soy la madre de su hijo y eso no lo va a cambiar nadie. Y yo creo que a una mujer se le respeta, por muy dolido que puedas estar. Yo te respeto porque eres el padre de mi hijo y siempre lo vas a ser. Y ojalá, ojalá Jesús, ojalá Dios ponga su mano en los dos y podamos salir adelante y podamos darle lo mejor a nuestro hijo, porque yo creo que se lo merece.
DF: Bueno… quiero decirte que mi mayor deseo como viejo hombre de las comunicaciones, como padre, como abuelo, como hijo, como hermano, deseo que esta entrevista, que debe haber tenido momentos incómodos para ti, sirva para que tu hijo sea feliz y ustedes, en la situación que sea, puedan ser felices y puedan encontrar aunque sea un reencuentro de amistad.
MDS: Yo no sé…Yo no sé si a mi hijo, a lo mejor, le gusta la televisión o no le gusta y, a lo mejor, no sé. Pero yo sé que esto va a quedar grabado en las redes sociales y quiero que sepas que pase lo que pase, te amamos los dos, que naciste del amor más puro que puede existir entre dos personas y que tú no tienes la culpa absolutamente de nada, nada de lo que pase. Matías, eres el regalo más grande que pude tener en mi vida y en la vida de toda tu familia, de mi parte y de la parte de tu papá.
DF: Muchas gracias por tener la confianza. Mira… yo sé que esto debe ser muy doloroso; tú guardas muchas cosas dentro de ti y quizá es difícil expresar. Yo también me he sentido acorralado a veces por la prensa, por las redes sociales, pero todo en la vida, Marjorie, pasa.
MDS: Espero.
DF: Todo va a pasar. Y después esto va a quedar solamente como un recuerdo amargo, pero un recuerdo.
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