“El homicidio de Rubén Espinosa vuelve a poner en el centro de atención la situación de Veracruz y la negligencia de las autoridades locales de brindar protección a periodistas. Hoy dicha entidad sigue siendo el lugar más peligroso para la libertad de expresión en toda América Latina” (Artículo 19)
La indignación, el enojo y la impotencia permean hoy en la comunidad periodística internacional. De nueva cuenta el gremio de comunicadores en México está de luto. Ahora fue el fotoperiodista asesinado vilmente, Rubén Espinosa Becerril, quien dijo que se “autoexiliaba” de Veracruz a buscar nuevos horizontes en el Distrito Federal, su ciudad de origen, porque aseguró que individuos desconocidos lo estaban siguiendo hasta su casa y en los eventos en donde realizaba su trabajo.
Y es que Rubén destacaba por su trabajo de fotoperiodista en todo tipo de protestas sociales en Veracruz, como corresponsal de la agencias Cuartoscuro y AVC Noticias.
También era un activo participante de todo tipo de manifestaciones para exigir justicia social, incluso llegó a ser arteramente golpeado en el 2013, en un desalojo de la Policía a manifestantes plantados en la Plaza Lerdo, en el centro histórico de Xalapa, a la que él mismo,junto con otros comunicadores veracruzanos rebautizaron como “Plaza Regina”, en memoria a la periodista asesinada de la revista Proceso.
Se trata de Rubén Manuel Espinosa Becerril, de 31 años, originario de la Ciudad de México, quien durante los últimos 8 años trabajó en Xalapa, la capital veracruzana que hoy se perfila como la entidad más sangrienta para el periodismo en la República Mexicana.
Así, Rubén Espinosa, luego de ser reportado desaparecido por su compañeros de la agencia informativa de Xalapa, AVC (donde trabajaba), fue encontrado muerto, el pasado 31 de julio, en un departamento de la ciudad de México, en la colonia Narvarte, junto con cuatro mujeres. Todos ellos fueron torturados y tenían impactos de bala. La información fue dada a conocer por la Procuraduría General de Justicia del Distrito FederaL,
Tras viralizarse la noticia en redes sociales, organizaciones dedicadas a la protección de los derechos de los periodistas, como “PenInternacional”, “Artículo 19”, “Periodistas de a Pie”, “Agencia Cuartoscuro” y la misma revista “Proceso”, así como las asociaciones de activistas y compañeros periodistas de Xalapa, con quienes trabajó directamente sus últimos 8 años, exigieron el inmediato esclarecimiento a la autoridades de la Ciudad de de México y se reunieron con autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, mismas que garantizaron esclarecer este lamentable hecho.
En un comunicado emitido al día siguiente por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, se informó que como resultado de los avances registrados en la investigación del homicidio cometido en agravio de cinco personas, por disparo de arma de fuego, se identificó plenamente por sus familiares a Rubén Espinosa.
Asimismo se establecieron que las edades de las mujeres víctimadas fluctuaban entre 18, 29, 32 y 40 años, de quienes omitieron dar sus identidades en cumplimiento al Protocolo de Investigación ministerial, policial y pericial con perspectiva de género para el delito de feminicidio.
No obstante trascendió y luego se confirmó que una de las 4 mujeres asesinadas, torturadas y abusadas sexualmente, era Nadia Vera, originaria del estado de Chiapas, antropóloga egresada de la Universidad Veracruzana, integrante de la Asamblea estudiantil de Xalapa y del movimiento #YoSoy132 , también de Xalapa.
Posteriormente la ProcurAduria del DF informó que la continuación de las primeras investigaciones efectuadas permitió establecer que una de las mujeres víctimas se desempeñaba como: maquillista, soltera y originaria de Mexicali, Baja California; otra más, realizaba actividades de promoción cultural, era soltera y originaria de Chiapas; la tercera víctima era empleada doméstica y proveniente del Estado de México; mientras que la cuarta de sexo femenino rea de origen colombiano y compartía residencia con el resto de las demás victimarios
La versión oficial,es que a partir del análisis de los hechos y las constancias recabadas en el lugar, hasta el momento se puede desprender que el móvil de los delitos supuestamente fue homicidio, robo y demás resultantes, sin excluir ninguna de las líneas de investigación abiertas para esclarecer los hechos.
De acuerdo al los reportes periciales, los cuerpos localizados en las distintas habitaciones del departamento presentaron, cada uno, una herida en la cabeza, producida por disparo de arma de fuego, calibre 9 milímetros; así como algunas escoriaciones en diversas partes del cuerpo, presuntamente originadas por el forcejeo previo al sometimiento al que fueron expuestas.
Periodistas Veracruzanos exigen justicia para Rubén
A 5 días del asesinato de Rubén y sus compañeras familiares, periodistas y activistas siguen exigiendo justicia y hoy se presentaron en el Congreso Local de Veracruz con sede en la ciudad de Xalapa para encarar a diputados y exigirles cumplir con su responsabilidad. Mostraron fotografías del rostro de Rubén Espinosa y leyendas condenando su asesinato en la Ciudad de México.
Fue el periodista Noé Zavaleta, corresponsal de la revista Proceso, en Veracruz, quien exigió la destitución de los diputados Gabriela Arango Gibb, Eduardo Sánchez Macías y Eduardo Robles Castellanos, como integrantes de la Comisión Permanente de Atención a Periodistas del Congreso del Estado.
En respuesta, el diputado panista Domingo Bahena Corbalá, pidió que se integrara una comisión de diputados para atender a quienes se manifestaban en silencio y posteriormente reanudar la session.
Noé Zavaleta rechazó la integración de una comisión de diputados, pues a su juicio dijo que eso no resuelve nada, por lo que solo leyó un comunicado en donde los comunicadores condenan el crimen del fotoperiodista.
También pidió que el Congreso del Estado exija a la Fiscalía General del Estado un avance sobre la agresión a estudiantes universitarios la madrugada del pasado 5 de junio de este año, ya que Rubén Espinosa cubrió y dio seguimiento a este hecho, sin embargo diez días después,se tuvo que autoexiliar por las amenazas que recibió.
“Señores diputados locales, hemos dejado de creer en las instituciones, demuéstrenos lo contrario”, finalizó el periodista.
Por Ylia Ortiz Lizardi/México DF
Fotografías: Luis Barrón/ Carol Suárez
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Es lamentable que en un estado tan hermoso como el que es Veracruz, existan tales sucesos. Pero esto solamente podrá terminar cuando existan un cambio ciudadano.
Creo que en estos tiempos es imperativo luchar por la libre expresión. No podemos permitir que nuestros ideales sean reprimidos. Nuestro país a sido Manchado de sangre por intereses políticos a lo largo de nuestra historia. Es tiempo de cambiar, de mejorar.