El bienestar laboral es el término con el que nos referimos a una situación de equilibrio entre todos los aspectos que condicionan la opinión que un empleado se forma sobre su entorno de trabajo.
A mayor sensación de bienestar, mejor será la predisposición del trabajador en el cumplimiento de sus obligaciones. Existe, por tanto, una relación directa entre este concepto y la productividad.
Los trabajadores que se sienten a gusto en su entorno laboral están expuestos a una menor incidencia de enfermedades y trastornos como la depresión, el estrés o los cuadros de ansiedad. Paralelamente, gracias al bienestar empresarial afrontan cada jornada con mayores niveles de motivación, siendo más propensos a colaborar y cooperar con sus compañeros.
Los profesionales regresan a casa mucho más satisfechos con sus actividades diarias e, incluso, sin la misma sensación de cansancio que se experimenta cuando el entorno de trabajo es menos agradable por diferentes motivos.
De este modo, la vida personal de los empleados se ve beneficiada por la sensación de bienestar en el trabajo.
Para la empresa, los factores anteriores se traducen en una menor cantidad de horas no trabajadas al cabo del año, tanto por retrasos como por ausencias puntuales de los trabajadores.
Las ausencias laborales por motivos psicológicos son poco habituales, la conflictividad laboral tiende a reducirse y la rotación de la plantilla disminuye.
Sentirse a gusto en el trabajo es una de las claves para conseguir los mayores niveles de productividad. Fomentar el bienestar laboral en la empresa es siempre una inversión acertada.
El clima laboral y la relación con los compañeros, las condiciones salariales, la organización de las tareas, la definición de los objetivos o el trato con los superiores son algunos de ellos.
Cuando las organizaciones adoptan una cultura de transparencia, se establece una base de confianza que contribuye significativamente a la satisfacción y productividad de los trabajadores.
La apertura en la comunicación, la toma de decisiones y la claridad en las políticas organizativas son elementos clave que influyen positivamente en el bienestar laboral.
Dicha transparencia no se limita a cuando tus empleados ya tienen más de 6 meses en sus funciones, sino que debe atravesar todo el ciclo de vida.
Por ejemplo, un proceso de contratación transparente y seguro, refuerza los beneficios de la transparencia.
Además, asegura el cumplimiento con las regulaciones laborales y reduce los riesgos legales. Esto contribuye a un entorno laboral seguro y protegido para empleadores y empleados, al mismo tiempo que mejora la imagen de tu marca empleadora.
Las Estrategias para manejar el estrés y fomentar el equilibrio trabajo-vida
es otra forma de potenciar el bienestar laboral del personal para que adquieran herramientas prácticas y el apoyo necesario para hacer frente a las exigencias del trabajo y que, a su vez, mantengan un equilibrio saludable entre sus responsabilidades profesionales y personales.
Entre las estrategias más efectivas, se encuentra la activación de programas de gestión del estrés, con sesiones de mindfulness, técnicas avanzadas de respiración y talleres sobre inteligencia emocional y manejo de las emociones en general. Estas actividades ofrecen herramientas concretas para dominar el estrés, pero también fomentan un espacio en el que los empleados pueden compartir experiencias personales y brindar apoyo unos con otros.
Otra estrategia muy útil es la promoción de políticas basadas en la flexibilidad porque permitir que los empleados puedan adaptar sus horarios según sus necesidades individuales o brindar la opción de trabajar desde casa puede reducir significativamente el estrés relacionado con los desplazamientos y facilitar un mejor equilibrio entre el trabajo y la vida personal.
El camino para establecer la confianza entre los líderes y los empleados es por medio de la transparencia en la comunicación interna, con objetivos claros y expectativas definidas. Algunos ejemplos prácticos de una comunicación abierta incluyen la celebración de reuniones regulares donde se compartan actualizaciones y se fomente el diálogo abierto. También, el uso de plataformas digitales para facilitar la retroalimentación constante y la creación de canales de comunicación específicos para discutir ideas y preocupaciones contribuyen a construir un entorno donde todos se sientan escuchados (y, por lo tanto, se obtiene un buen clima laboral).
Respecto a la cultura organizacional, aquí es donde se debe trabajar por el respeto y la empatía. Para eso, se pueden establecer políticas firmes relacionadas con la no tolerancia al acoso, organizando eventos que celebren la diversidad y reconociendo públicamente los logros individuales para fomentar un ambiente de apoyo mutuo. Asimismo, la implementación de jornadas de capacitación en habilidades blandas como la comunicación efectiva y la gestión de conflictos, ayuda a cultivar una cultura que valora la colaboración y la comprensión mutua. Además, la creación de espacios de trabajo que fomenten la interacción, como áreas comunes o eventos sociales, fortalece los lazos entre los miembros del equipo.
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Fuera el drama y la queja: ¡Sonríe siempre!
Directora Ejecutiva y conductora del programa radial Mujeres Positivas en el mundo a través de Positivo Extremo Radio.com desde Los Ángeles, California. Publicista, locutora internacional, asesora de imagen, coach ontológico y fundadora de Starfish Conference empresa dedicada al crecimiento personal y profesional. Actualmente colabora para la revista La Nota Latina
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