Existen cinco maneras de recobrar completamente su salud en este momento, según expertos. No importa quién seas ahora o con lo que estés tratando, seguir deliberadamente muchos consejos, estrategias y hábitos realmente simples que pueden llenarte de una energía intangible y una vitalidad única en ti. La parte física, mental y emocional, entra en juego para que te sientas sano, motivado, optimista y lleno de emociones positivas.
Meaghan B Murphy, autora del nuevo libro, Your Fully Charged Life, se transformó de una autodenominada gruñona malhumorada a alguien que aborda la vida de manera diferente, con energía, positividad y entusiasmo aparentemente ilimitados. Y está convencida de que su nuevo manual de felicidad te ayudará a hacer lo mismo.
La vida completamente cargada se basa en un principio: Cada día, cada hora, a veces momento a momento, tú eliges conscientemente actuar de una manera positiva o buscar lo positivo en situaciones.
Para vivir la vida de esta manera, tienes que salir y, bueno, vivir, participar activamente en la vida y hacer cosas que generen felicidad y generen energía positiva. Y para hacer cualquier cosa más allá de lo mínimo, más allá de las cosas que ya haces, requiere un cierto grado de energía y resistencia cruda, física, además de resistencia mental y emocional.
Lo que es tan genial es que junto con la energía física, cargar tu salud produce una poderosa carga mental y emocional. Hacer ejercicio y comer bien mata el estrés, lo que le da paciencia adicional y espacio en la cabeza para hacer frente a los obstáculos y desvíos de la vida. Equilibran tu estado de ánimo e inundan tu cerebro con productos químicos que te ayudan a disfrutar y apreciar el paisaje en el camino. Y esta combinación de energía física, mental y emocional te hace imparable.
Mira los consejos de Meaghan B Murphy:
1.- Los pequeños cambios pueden ser enormes
Los estudios muestran que incluso las mejoras modestas de tu dieta, como simplemente comer algunas frutas y verduras más todos los días, pueden mejorar el estado de ánimo y aumentar los sentimientos de felicidad y bienestar. Además, todos los expertos en nutrición consideran que la mayoría de la gente, lo que importa es cómo comes la mayor parte del tiempo, no en ninguna comida o noche de vacaciones.
2.-Considera lo que estás recibiendo, no rendirte
La gente a menudo piensa en una alimentación saludable como si fuera una tarea muy poco divertida. o se centran en lo que están sacrificando en lugar del bien que están haciendo. Eso es un error; cómo piensas y hablas sobre la comida moldea tu perspectiva y cómo te sientes y te comportas. Trate de reformular las opciones saludables. Si estás comiendo una ensalada, ámatela por lo que está haciendo por tu energía y salud y gracias por tomar esa decisión en lugar de odiarla porque no es papas fritas de discoteca.
3.- Abandone la mentalidad “buena” o “mala”
Sí, ciertos alimentos son más saludables que otros. Eso no hace nada bueno o malo, ni eres bueno o malo basado en lo que comes. ¿Dices o piensas cosas como “Soy tan malo, tomé un enorme tazón de helado” o “Voy a ser bueno y pedir pescado a la parrilla”? Cuanto más se infiltra el lenguaje cargado en tu cerebro y tu habla y más emociones y tu identidad se enredan en las elecciones de alimentos, más te sientes empantanado persiguiendo tus metas de alimentación saludable.
4.- Nunca te pierdas un lunes
No importa cuántos días hagas ejercicio, haz uno al lunes. Así como hacer ejercicio a primera hora de la mañana marca la pauta para su día, una sesión de sudor de inicio de semana puede establecer el tono para los próximos seis días y ayudar a matar tanto las cicatrices del domingo como el blues del lunes.
5.- No juegues a esconderte y buscar
Es mucho más probable que elijas alimentos saludables si está justo ahí, delante y en el centro de la nevera o a la vista en el mostrador. Ropa de entrenamiento, zapatillas u otro equipo en su armario o hogar; verlos puede ser el empujón suave que necesita para mantenerse o activarse.
Fuente: Eat This, Not that
Foto portada: by Messan Edoh from Pixabay
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