El Congreso aprobó una legislación para hacer que los senadores y los miembros de la Cámara de Representantes sean personalmente responsables de los reclamos de acoso sexual, reportó el diario San Francisco Chronicle.
Esta acción resolvió un enfrentamiento de un mes de duración entre la Cámara de Representantes y el Senado, donde los legisladores aprobaron diferentes versiones de la legislación para regular cómo el Congreso maneja el acoso dentro de sus muros.
La legisladora demócrata de California, Jackie Speier y su copatrocinador clave en el proyecto de ley de la Cámara de Representantes, el republicano Bradley Byrne de Alabama, prevalecieron en su esfuerzo por incluir una disposición que responsabilice a los legisladores de pagar los juicios legales y los acuerdos por hostigamiento. Los negociadores del Senado lograron evitar que esa responsabilidad se extendiera a las reclamaciones por discriminación.
En la actualidad, los contribuyentes pagan sentencias y acuerdos legales contra miembros del Congreso. Los contribuyentes han pagado $ 17 millones por reclamos de discriminación y acoso desde 1997, según la oficina del Congreso que los administra. Desde 2013, la Cámara ha pagado más de $ 100,000 específicamente por acoso sexual y discriminación.
Speier ayudó a elaborar su legislación después de que el movimiento #MeToo comenzara a exponer casos en los que hombres poderosos en campos como el entretenimiento, la política y los medios de comunicación se habían involucrado en patrones prolongados de acoso y abuso sexual.
Speier dijo que ella y Byrne volverían a intentar reclamaciones por discriminación en el próximo Congreso, además de presionar para exigir investigaciones independientes al comienzo del proceso de reclamación.
La Cámara de Representantes y el Senado aprobaron el pasado jueves el proyecto de ley de compromiso por unanimidad. Ahora, la legislación se dirige al presidente Trump para que la firme.
FUENTE: sfchronicle.com
